jueves, 14 de abril de 2011

¿Es Twitter realmente una red social?

De repente, Twitter es la palabra mágica. Todo el mundo quiere estar, todo el mundo tiene algo que decir, algo que comentar, algo que tuitear. Con sólo cinco años de vida, cuenta con 200 millones de usuarios en todo el mundo –lejos aún de los más de 500 millones de Facebook- y cada día se registran en torno a 140 millones de tuits, unos 1.600 por segundo.

Sin embargo, detrás de estas apabullantes cifras, detrás de esa definición de red social, se esconde un fenómeno mucho más complejo de lo que aparenta y menos participativo de lo que cabría esperar. Mientra que en Facebook la gente se dedica a buscar viejos amigos o compañeros de clase, a felicitar cumpleaños o colgar fotos de viajes o fiestas familiares, a intercambiar mensajes, a mantener relaciones cruzadas, en definitiva, Twitter funciona de un modo distinto.

Según un estudio realizado por Yahoo! bajo el esclarecedor título “Quién dice qué a quién en Twitter”, tras analizar un total de 260 millones de tuits han llegado a la conclusión de que un 50% de esta cantidad ha sido escrito por un pequeño grupo de unos 20.000 usuarios, lo que supone apenas el 0,05% del total de cuentas existentes en el mundo.

Estaríamos, por tanto, ante una especie de comando de élite de tuiteros capaces de generar por sí mismos 70 millones de mensajes, mientras que los otros 70 millones serían obra del restante 99,95% de los usuarios. ¿Quién forma parte de este grupo de elegidos? Pues, en su mayoría, se trata de famosos, deportistas o actores, que cuentan con cientos de miles e incluso millones de seguidores.

Paralelamente, también estarían en este grupo algunos medios de comunicación, organizaciones no gubernamentales, instituciones y organismos oficiales o clubes deportivos. Por último, también nos encontraríamos con algunos “gurús” de la red que siguen contando con multitud de seguidores.

El estudio también refleja que los usuarios regulares de Twitter reciben la información a través de diversas vías pero la mayor parte de éstas no son precisamente los medios de comunicación, ya que sólo el 15% de los tuits recibidos por un usuario promedio provienen de algún medio. Otro detalles es que los periodistas y comunicadores generan más tuits, es decir, escriben más micromensajes, pero las celebridades son más leídas. Por tanto, cabe pensar que muchas veces a los usuarios les interesa más quién dice que qué se dice.

Otra de las conclusiones de este trabajo es la forma en que se producen los flujos de comunicación. Así, el fenómeno de la endogamia está muy extendido, de tal modo que los periodistas se siguen entre ellos, los médicos siguen a los médicos, los blogueros a los blogueros…

En lo que se refiere a los temas principales de los que se habla, los analistas han determinado que el que más comentarios genera es la actualidad de carácter internacional, seguido de las noticias referentes a Estados Unidos. El tercer puesto lo ocupan las informaciones deportivas, lo que demuestra el gran interés que suscita este tema en todo el mundo, y para ello basta echar un vistazo al número de seguidores, no sólo de los deportistas de élite, sino de los periodistas deportivos o los clubes.

Con todos estos datos, podemos afirmar que las estructuras comunicativas de Twitter están muy lejos de las que se suelen atribuir a las redes sociales, es decir herramientas participativas con flujo de información en todas direcciones. Por tanto, estaríamos más ante un modelo con bajos niveles de reciprocidad que se asemeja más al sistema de los medios de comunicación de masas de un único sentido y en el que la “participación” del usuarios receptor del mensaje es su retuiteo, es decir, rebotarlo a sus seguidores, o realizar algún tipo de comentario.

lunes, 4 de abril de 2011

Flipboard, ¿un nuevo modelo de publicación digital?

¿Qué le parecería una revista digital con un diseño atractivo y novedoso en la que usted pudiera elegir los contenidos que le apetece leer, integrar sus redes sociales favoritas, añadir vídeos y personalizarla a su antojo? Bueno, pues si usted es poseedor de un iPad ya lo tiene y se llama Flipboard, una aplicación que Apple eligió como la mejor de 2010 para este dispositivo y que, además, tiene un valor añadido: es gratuita.

¿Que no había oído hablar de Flipboard? Pues estamos ante un nuevo formato de medio de comunicación que, si bien no añade contenidos propios, permite que usted decida integrar los que desea. Y es que vendría a ser como una hermosa carpeta en cuyo interior podemos guardar lo que más nos vaya gustando de lo que encontramos en la web y, además, ver lo que dicen nuestros seguidores de Twitter o publican nuestros amigos en Facebook, compartir esos contenidos, utilizar Google Reader… y todo aprovechando las funcionalidades táctiles del iPad, con lo que podemos echar un vistazo a todo eso que hemos ido guardando con sólo mover un dedo, tal y como pasaríamos las hojas de unas revista.

Esta herramienta, que vio la luz el pasado verano, se acaba de remozar, adelantándose al lanzamiento del nuevo iPad2. Una de las principales novedades es que integra Instapaper e Instagram, la red social para compartir fotografías entre usuarios de iPhone y que ha alcanzado un éxito sin precedentes.

Otra de las mejoras que incorpora es la posibilidad de buscar a través de redes sociales. Se trata de una característica que viene a revolucionar el modo en que se pueden consumir contenidos. Su funcionamiento, y de ahí la clave de su éxito, es muy simple: en una nueva barra de búsqueda escribimos las palabras claves de lo que deseamos encontrar y Flipboard lo busca en Twitter, Facebook, Flickr y nos ofrece diversos tipos de resultados, con los que, de forma automática, construye una publicación con formato de revista y un diseño tremendamente atractivo y visual. Algo que no deja de sorprender.

No menos interesante es la posibilidad de navegar entre nuestros álbumes de fotos subidas a Flickr y también entre los de nuestros amigos, por lo que visualizar dichas imágenes se convierte en algo fácil y divertido.
Estamos, por tanto, ante un serio rival de experimentos como “The Daily”, el periódico lanzado  a principios de febrero por Rupert Murdoch para el iPad. Es más, son muchos los internautas que prefieren el modelo de Flipboard, pues, pese a que no deja de ser un agregador de contenidos ajenos, es un formato mucho más dinámico y flexible, que se adapta a los gustos de cada internauta, que se renueva tantas veces como queramos y que es interactivo.

“The Daily” y Flipboard, cuya valoración en el mercado podría rondar los 200 millones de dólares, bien podrían ser los dos principales modelos a tener en cuenta a la hora de ver hacia dónde se dirigen los medios nacidos para los nuevos soportes. Su éxito dependerá, entre otras cosas, de la popularización de las tabletas entre el gran público y de que ambas aplicaciones sean capaces de adaptarse a otros sistemas operativos, especialmente al Honeycomb de Android, con el que vendrán equipados la mayoría de estos dispositivos.