jueves, 18 de marzo de 2010

¿Sueñan los androides periodistas con exclusivas eléctricas?

Las nuevas tecnologías han colocado a la profesión periodística en una profunda encrucijada. Los cambios de hábitos de la población, Internet, la llegada de nuevos soportes, el periodismo ciudadano, la dictadura de la inmediatez... Todos estos factores obligan al profesional de los medios a replantearse sus esquemas y a cambiar incluso su forma de trabajar. Y por si todo esto fuera poco, ahora la tecnología trata de suplantarnos y demostrarnos que, por muy importantes que nos creamos, nuestro trabajo puede ser realizado por un ordenador y el software adecuado. Eso es, al menos, lo que han demostrado los científicos estadounidenses Larry Birnbaum y Kris Hammond, especialistas en inteligencia artificial que han concebido un programa informático, denominado Stats Monkey, capaz de, con unos cuantos datos, unas estadísticas y poco más, escribir informaciones periodísticas. Una vez ideado, su desarrollo ha sido encargado a John Templon, un licenciado en Periodismo de 27 años, y a Nick Allen, informático de 25 años.

De acuerdo que se ha tratado de una crónica deportiva; de un partido de béisbol entre los Minessota Twins y los Texas Rangers. Pero ha bastado con que los programadores informáticos del laboratorio Infolab, en la Universidad Northwestern, introdujesen en el ordenador una serie de frases utilizadas habitualmente por los periodistas deportivos, algunas palabras clave, expresiones, figuras retóricas... para que el sistema fuese capaz de construir un texto perfectamente legible, sin faltas de ortografía, sin incongruencias. El software está programado para saber cuáles han sido los jugadores decisivos y puede incluso pedir al archivo gráfico una foto de uno de esos jugadores y hasta de poner un titular a la noticia. Y firma como “La máquina”.

La aplicación es capaz también de hacer varias versiones diferentes de la misma información, dependiendo de si está escrita para los lectores del equipo ganador o del perdedor. Además, por sus características, podría aplicarse a otro tipo de informaciones basadas en datos y estadísticas, como por ejemplo las noticias económicas. Y lo que es más importante: puede realizar este trabajo en apenas unos segundos.

Que este tipo de crónicas nunca podrá llegar a ser igual que las escritas por personas, quizás. Que una máquina no puede darle a una noticia ni sentimiento, ni pasión, pues seguro que no, pero un periodista tampoco debiera hacerlo -ya sé que la objetividad es una entelequia, pero las formas son las formas-.
Más allá de que estemos ante un experimento científico, lo que está claro es que un sistema informático ha sido capaz de poner al descubierto las vergüenzas de la profesión y es que, la mayoría de las veces, las informaciones son idénticas entre unos medios y otros, las agencias gobiernan y, si no fuera por las páginas de opinión y los editoriales, sería difícil distinguir un periódico de otro, tal es el grado de “cortapeguismo” que lo inunda todo.

Y no nos durmamos en los laurales, porque los responsables del proyecto ya han anunciado que van a lanzar una versión comercial que pronto se podrá adquirir online. Kris Hammond ya ha dicho que estará pensada, sobre todo, para aquellos periódicos locales y medios digitales deportivos que no tienen posibilidad de cubrir todas las competiciones deportivas que se desarrollan en su región.

No hay comentarios:

Publicar un comentario